Las mejores frases de las “Meditaciones” de Marco Aurelio
Marco Aurelio dejó un gran grupo de frases destacadas en las “Meditaciones“. Dónde a día de hoy, más de dos mil años después de ser escritas, encontramos un sinfín de reflexiones que podemos aplicar a nuestra vida y que nos ayudan a entender a que hemos venido. Las “Meditaciones” han sido una gran fuente de inspiración para esta corriente filosófica.
La mejores frases de las meditaciones de Marco Aurelio:
Libro II
- Hemos nacido para la cooperación, actuar los unos contra los otros es ir en contra de la naturaleza.
- La vida es finita, si no la aprovechas pasará y no habrá segunda oportunidad.
- En todo momento preocúpate por eso que esta en tu control y puedes hacer, deshazte de las distracciones.
- Nadie no pierde esta vida que es la que esta viviendo, y vive otra vida que la que esta perdiendo.
- Tanto el que ha vivido mucho tiempo, como al que le toca morir antes, tienen una perdida idéntica. Y es que solo hay un presente del cual uno puede ser desposeído, porque este es el único que uno tiene, y nadie puede perder eso que no posee.
- La finalidad del ser humano es obedecer la razón.
- Sólo nos puede hacer compañía la filosofía.
- La muerte no es más que la disolución de los elementos que componen a cada uno de los seres vivos.
- El hecho de preocuparse por los demás es propio de la naturaleza humana.
- Sólo hay que tener en cuenta la opinión de aquellos que viven conforme a la naturaleza.
- No hay que hacer caso de los halagos de las personas que no están bien ni con ellas mismas.
Libro III
- No actúes nunca en contra de tu voluntad.
- Que la afectación no haga volver vanidoso tu pensamiento.
- Mira que en tu interior haya serenidad. Que no necesites ni ayuda externa ni la tranquilidad que te proporcionan los demás.
- Lo mejor es aquello que es útil.
- Sólo hay que evitar una cosa en el transcurso de la vida. Que la mente no experimente ninguna desviación impropia de un ser racional y sociable.
Libro IV
- El universo es transformación. La vida es opinión.
- El nacimiento es una combinación de los mismos elementos de los que la muerte es la disolución.
- Todo aquello que sucede, sucede justamente.
- Cuanto tiempo libre gana aquel que no esta pendiente de lo que ha hecho, dicho o pensado el vecino, sino que solo tiene cura de sus pensamientos.
- Si suprimiéramos la mayoría de cosas que decimos y hacemos que son innecesarias ganaríamos tiempo y tranquilidad. Y no solo las acciones innecesarias, también los pensamientos.
- Que nuestro pensamiento sea justo, que nuestras acciones sean útiles a la comunidad, que nuestro lenguaje sea incapaz de engañar y que nuestro ánimo esté predispuesto a acoger todo aquello que sucede como algo necesario.
- La naturaleza universal no ama nada tanto cómo el hecho de transformar las cosas existentes y el hecho de crear nuevas de la misma especie.
- Muy tempranamente habrás muerto. Y aún no eres ni simple, ni imperturbable, ni libre de la sospecha que nada exterior no pueda perjudicarte, ni benévolo con todo el mundo, ni convencido de que la sabiduría consiste simplemente a actuar según la justicia.
- Procura que la parte de tu anima que formula juicios sobre el mal, no opine que es malo y que es bueno aquello que igualmente puede suceder a un hombre malvado o a un hombre honesto.
- Cómo solía decir Epicteto “Eres una pequeña anima que lleva el peso de un cadáver”.
- Las consecuencias están extremadamente relacionadas con los antecedentes.
- Cómo decía Heráclito, No hay que comportarse cómo hijos del progenitor, es decir, no hay que aceptar las cosas de una manera simple, tal y cómo las hemos heredado.
- Considera siempre las cosas humanas efímeras y carecientes de valor.
- Feliz de mí. Porqué aún todo lo que me ha pasado, sigo impertérrito, no abrumado por el presente, ni asustado por el futuro.